Acabo de leer este artículo http://cesartomelopez.blogspot.com/2011/01/el-lado-oscuro-de-los-antioxidantes.html de uno de los mejores blogs de divulgación científica en castellano. Éste artículo es altamente recomendable para entender el efecto de los conocidos antioxidantes y los radicales libres.
Resaltaría este párrafo:
¿por qué los antioxidantes pueden ser tan peligrosos cuando se ingieren como suplemento? Una hipótesis es que, a altas dosis, los antioxidantes pasan a ser oxidantes creando los efectos sobre el ADN y las células en general que se supone que deberían evitar. Otra hipótesis, seguramente más probable, es que estaríamos ante la versión humana de lo que se está encontrando en los ratones de laboratorio, esto es, los antioxidantes interferirían en la acción de las células del sistema inmunitario que combaten el cáncer y la infección. Efectivamente, los enemigos, los pérfidos radicales libres, realizan funciones muy importantes en el organismo. La principal, luchar contra las toxinas (los leucocitos de la sangre segregan cantidades muy grandes de radicales libres para combatir las infecciones bacterianas) y luchar contra las células cancerosas.
Como dicen los ingenieros: Si algo no funciona, no lo toques.
El cuerpo humano es así, hay cosas que no tienen ninguna función aparente o incluso que parecen perjudiciales, como los radicales libres, pero si después de tantos millones de años de evolución siguen ahí, es posible que sea por algo.
No tiene nada que ver esto con no tratar las enfermedades o no vacunarse, no quiero que mis palabras se entiendan como un rechazo a la medicina, todo lo contrario. Los virus y bacterias llevan atacando nuestros sistemas desde tiempos inmemoriales y no por ello hay que dejarlas actuar, hay que tratar esas enfermedades y prevenirlas en la medida de lo posible ya que éstas van en contra de nuestra salud.
El caso de los radicales libres es diferente al de virus y bacterias, ya que son señalados a menudo como los principales artífices del envejecimiento y puede que sea así, pero su eliminación tiene efectos secundarios negativos que se deben tener en cuenta.
El artículo que enlazo habla de no aumentar la ingesta de antioxidantes de manera artificial, esto es, mediante suplementos como cápsulas, cosméticos o preparados con alto contenido en antioxidantes. Una dieta equilibrada también incluye antioxidantes, pero incluye los que son necesarios para la vida. Muchas veces aumentar artificialmente un determinado elemento de la alimentación produce desequilibrios ya que el organismo está preparado para asimilar unas cantidades determinadas de vitaminas, proteínas, grasas, sales minerales, etc.
Dicho esto, si quieres retrasar el envejecimiento, lo mejor es mantener una dieta equilibrada y practicar deporte habitualmente, tres veces por semana serían suficientes para mantenerte en forma y eliminar de tu organismo aquellas sustancias perjudiciales, como las toxinas.
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