Tendemos a generar alarma cuando nos duele alguna parte de nuestro cuerpo y creemos que lo que tenga que pasar seguramente este `ahí debajo´, pero a veces no coincide la lesión con el lugar de aparición de síntomas.
El síndrome de dolor miofascial (SDM) es un conjunto de signos y síntomas provocados por puntos gatillo miofasciales (PGM); el punto gatillo activo es un foco hiperirritable dentro de una banda tensa del músculo esquelético, es doloroso a la compresión, es desproporcional en relación estímulo respuesta, suele presentar mucha focalidad y hiperalgesia (a poco estímulo mucho dolor) y suele provocar un dolor referido. Entendemos como dolor referido una disfunción motora que provoca debilidad, hiperalgesia y pérdida de movilidad. Se suele relacionar con contractura, ya que provoca un espasmo muscular y puede conllevar al aumento de tono y a compartir cierta sintomatología.
Hay muchas otras patologías que presentan síndrome de dolor miofascial, no hay que confundirlas con PGM.
- Fibromialgia
- Reumatismo no articular
- Codo de tenista
- Ciática
- Contractura
- Miofascitis
- Mialgia
SIGNOS Y SÍNTOMAS PUNTOS GATILLO MIOFASCIALES
Puede estar presente en toda parte de tejido miofascial ya sea cicatriz cutánea, periostio (hueso), zona visceral…
- Espasmo
- Síndrome de dolor miofascial
- Debilidad muscular
- Restricción movilidad
- Aumento fatigabilidad
- Descoordinación
- Inhibición
Son medibles con un Umbral de dolor a la presión y con un Algómetro, está comprobado que el músculo presenta un aumento de concentración de sustancias químicas. (Jay Shan y Cols, microanálisis PGM).
MECANISMOS ACTIVACIÓN
Los PGM puede ser activados por otros PGM
- Disfunción articular
- Sobrecarga aguda/ crónica
- Traumatismo directo.
- Enfriamiento
- Estrés emocional
- Enfermedades viscerales
Puede existir un músculo con varios PGM, y cada uno puede tener un patrón de dolor referido, hay patrones específicos reflejados en unas láminas creadas por Travell & Simons, al que hemos de agradecerle muchos de estos estudios.
Los PGM se hallan mediante la palpación de un fisioterapeuta preparado y especializado en el campo. Se pueden observar espasmos y la activación del patrón del dolor.
¿ CÓMO SE ABORDA ESTA PATOLOGÍA ? ¿CÓMO SE TRATAN LOS PGM?
Dependiendo del grado de lesión, paciente y diagnóstico. Es importantísimo un buen diagnóstico a la hora de aplicar un tratamiento, será mas eficaz el resultado cuanto más exacto sea el diagnóstico.
- FISIOTERAPIA CONSERVADORA: Mediante técnicas manuales y aplicación de diversas terapias ( masoterapia, percusión, FNP, energía muscular)
- FISIOTERAPIA INVASIVA: Se utilizan agujas parecidas a las de acupuntura, son un poco más gruesas recubiertas por un teflón que facilita la entrada y la salida. La debe hacer un fisioterapeuta especializado. Es lo que llamamos PUNCIÓN SECA. Puede ser superficial (Peter Baldry), sin llegar al músculo donde generalmente se busca más relajación y analgesia. O profunda (Travell&Simons, Hong, Gunn) donde se llega al músculo afectado con varias entradas y salidas con el fin de aportar más oxígeno y tratar esa banda tensa, promoviendo a que reciba mas aporte sanguíneo con nutrientes necesarios para su recuperación.
Está comprobado la eficacia terapéutica es equivalente a la de la infiltración por diversos estudios. No es recomendable realizar más de tres punciones profundas por día.
BIBLIOGRAFÍA:
Saime Ay, Deniz Evcik. Comparison of injection methods in myofascial pain syndrome: a randomized controlled trial. Clin rheu 2009 May 27
Simons DG, Travell JG, Simons PT. Travell and Simons’ myofascial pain and dysfunction: the trigger point manual. Vol 1.
En la puncuón seca se usan agujas de ACUPUNTURA, ¡qué manía!